Cocinera / Rosetta / Ciudad de México
Chef y empresaria, Elena ha creado en su carrera espacios alineados con los valores en los que siempre ha creído. “He comprendido que un restaurante no solo sirve para ofrecer experiencias placenteras, sino que puede ser un agente de cambio. Me emociona pensar que, a través de la comida, podemos cuidar nuestro cuerpo, fortalecer comunidades y proteger la biodiversidad”.
Su mayor reto y su mayor satisfacción, dice la chef, es liderar un equipo y equilibrar su rol como madre con la profesión. Además, tiene la certeza de que cocinar es un acto de amor y de cuidado, y que es posible hacer de la cocina un espacio más inclusivo, donde las mujeres no tengan que elegir entre su vocación y su vida personal.
